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Comala, nostalgia y los peces de ciudad

Estando en el Slack de PHPMX alguien comentó que la película de Pedro Páramo de Netflix está buena, y yo recuerdo que ese es un libro de Juan Rulfo, y me acordé del libro de El llano en llamas que lo leí en el bachiller por lo cual recordé el pueblo de Luvina, que es un cuento dentro del libro; a esta conexión recordé la canción de Joaquín Sabina. Pero, ¿por qué está serie de recuerdos? Pues resulta que yo estaba confundiendo Pedro Páramo con El llano en llamas, del cual también estaba confundiendo el pueblo al que hace referencia la película que es Comala no Luvina. Y dice Joaquín Sabina en su canción Peces de Ciudad:  Y estaba intrigado por saber, ¿por qué a un lugar donde has sido feliz no debes volver? En lugar de ponerme a reflexionar profundamente, le pregunté a Gemini , esto es parte de lo que contestó: ¿Por qué "al lugar donde has sido feliz no debieras tratar de volver"? Esta frase encierra una reflexión sobre la naturaleza del pasado y la ilusión. Sabina, a través d...

Esto también pasará.

Esto también pasará, esta frase me la ha recordado mucho mi mente y me ha acompañado a lo largo de los últimos 3 o 4 años tras leer un librillo de cuentos reflexivos la verdad no se porque la persistencia en mi cabeza.
Una vez platicando con Anita me la recordó y yo no recuerdo de donde se la dije o ¿acaso la había mencionado mucho en mis platicas con ella?

Hoy quiero compartir el texto contigo espero te pueda ayudar. Quiza creas que no tiene sentido pero cuando sientas que todo esta mal repitela, no pierdes nada. O cuando todo este marchando de maravilla también repitela:

ESTO TAMBIÉN PASARÁ

Hubo una vez un rey que dijo a los sabios de la corte: - Me estoy fabricando un precioso anillo. He conseguido uno de los mejores diamantes posibles. Quiero guardar oculto dentro del anillo algún mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación total, y que ayude a mis herederos, y a los herederos de mis herederos, para siempre. Tiene que ser un mensaje pequeño, de manera que quepa debajo del diamante del anillo.

Todos quienes escucharon eran sabios, grandes eruditos; podrían haber escrito grandes tratados, pero darle un mensaje de no más de dos o tres palabras que le pudieran ayudar en momentos de desesperación total. Pensaron, buscaron en sus libros, pero no podían encontrar nada.

El rey tenía un anciano sirviente que también había sido sirviente de su padre. La madre del rey murió pronto y este sirviente cuidó de él, por tanto, lo trataba como si fuera de la familia. El rey sentía un inmenso respeto por el anciano, de modo que también lo consultó. Y éste le dijo: -No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje.

Durante mi larga vida en palacio, me he encontrado con todo tipo de gente y en una ocasión me encontré con un místico. Era invitado de tu padre y yo estuve a su servicio. Cuando se iba, como gesto de agradecimiento, me dio este mensaje -el anciano lo escribió en un diminuto papel, lo dobló y se lo dio al rey. Pero no lo leas -le dijo- manténlo escondido en el anillo.

Ábrelo sólo cuando todo lo demás haya fracasado, cuando no encuentres salida a la situación Ese momento no tardó en llegar. El país fue invadido y el rey perdió el reino. Estaba huyendo en su caballo para salvar la vida y sus enemigos lo perseguían.

Estaba solo y los perseguidores eran numerosos. Llegó a un lugar donde el camino se acababa, no había salida: enfrente había un precipicio y un profundo valle; caer por él sería el fin. Y no podía volver porque el enemigo le cerraba el camino. Ya podía escuchar el trotar de los caballos. No podía seguir hacia delante y no había ningún otro camino. De repente, se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró un pequeño mensaje tremendamente valioso: Simplemente decía "ESTO TAMBIÉN PASARÁ"

Mientras leía "ESTO TAMBIÉN PASARÁ" sintió que se cernía sobre él un gran silencio. Los enemigos que le perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado de camino, pero lo cierto es que poco a poco dejó de escuchar el trote de los caballos. El rey se sentía profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido. Aquellas palabras habían resultado milagrosas. Dobló el papel, volvió a ponerlo en el anillo, reunió a sus ejércitos y reconquistó el reino. Y el día que entraba de nuevo victorioso en la capital hubo una gran celebración con música, bailes y él se sentía muy orgulloso de sí mismo.

El anciano estaba a su lado en el carro y le dijo: Este momento también es adecuado vuelve a mirar el mensaje. -¿Qué quieres decir? -preguntó el rey-. Ahora estoy victorioso, la gente celebra mi vuelta, no estoy desesperado, no me encuentro en una situación sin salida. -Escucha -dijo el anciano: este mensaje no es sólo para situaciones desesperadas; también es para situaciones placenteras. No es sólo para cuando estás derrotado; también es para cuando te sientes victorioso No es sólo para cuando eres el último; también es para cuando eres elprimero..

El rey abrió el anillo y leyó el mensaje: "ESTO TAMBIÉN PASARÁ" , y nuevamente sintió la misma paz, el mismo silencio, en medio de la muchedumbre que celebraba y bailaba, pero el orgullo, el ego, había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Se había iluminado.

Entonces el anciano le dijo:

Recuerda QUE TODO PASA..... Ninguna cosa, ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche, hay momentos de alegría y momentos de tristeza. ¡¡ Acéptalos!! como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.


Buen día.
Texto tomado de: Pensamientos Mx.

Comentarios

An!ta dijo…
Deberías de poner en reacciones, bonito, llorosos, nenas y cosas asi :)

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